Comenzando con lo que no sabemos





Paul von Ward (EE.UU.)





Al inicio de un juicio, los abogados de la defensa y de la fiscalía pueden estipular que un fragmento de la evidencia sea aceptado como "verdadero", no disputado por ninguna de las partes. Esto se hace generalmente cuando ambos creen que los observadores objetivos (en este caso, el jurado) aceptarían su veracidad. Entonces el litigio puede ocuparse de los puntos que un lado o el otro consideran "no verdaderos".

En las ciencias físicas y sociales, en la psicología, la metafísica, y la religión, creo que el estudio de todas las cuestiones debería comenzar con el planteamiento opuesto: Estipulación de lo "desconocido". Si un jurado que representa tradiciones discrepantes no pudiera convenir que la evidencia demuestra que la respuesta es "verdad", todas los partes, en buena conciencia, deberían calificarla como creencia, suposición, o hipótesis. Aplicando este estándar, la mayor parte de lo que rotulamos como "verdad" tendría que ser considerado todavía como en el apartado de lo "desconocido".

Cuando uno toma a conciencia de este enfoque, enseguida pone en claro la lista de "lo que no sabemos", que por lejos excede a la de lo que estamos enterados. Los siguientes son algunos ejemplos de las muchas preguntas importantes para las cuales no sabemos las respuestas. Agregue sus propias medidas a lo que lee.

Antropología: ¿Cuál fue la primera civilización? ¿Quién descubrió las matemáticas avanzadas? ¿Quiénes desarrollaron los primeros idiomas? ¿Por qué se basan en las matemáticas? ¿Quién domesticó a los gatos y perfeccionó las cosechas para el consumo humano? ¿Quién descubrió los valores medicinales de las hierbas?


Biología/Química: ¿Cómo comenzó la vida en la Tierra, o dondequiera? (es decir, ¿cómo vinculamos la física y la bioquímica?) ¿Cómo se formaron las diversas especies? ¿Cómo surgieron las diversas razas? ¿Cuál es la forma de vida más pequeña? ¿Qué causa el sueño? ¿Dónde residen las indicaciones para la diferenciación celular? ¿Cuál es la relación del medio ambiente y los genes para la inteligencia? ¿Cuál es el punto final de la muerte física?

Cosmología: ¿Cuál es el origen del Universo? ¿Cómo y cuándo surgió la consciencia? ¿Existen seres conscientes similares a los humanos? ¿Hemos descubierto todos los planetas del Sol? ¿Cuál es la naturaleza de la realidad fuera de este universo?

Física: ¿De dónde viene la materia del Universo? ¿Qué es la materia oscura? ¿Cuál es la partícula más pequeña? ¿Cuál es la naturaleza de las antipartículas o de las partículas? ¿Hay un espectro de energía no medido? ¿Qué es la forma sutil de energía vista por muchos entrar al cuerpo en el nacimiento y salir de él en la muerte?

Psicología: ¿Dónde reside la personalidad? ¿Qué son los sueños? ¿Por qué los placebos curan? ¿Cómo percibimos objetos/eventos a distancia? ¿Cuál es la naturaleza de la consciencia no-humana? ¿Dónde se almacenan los recuerdos?

Hay mucha experiencia humana y evidencia acumulada que apunta a las aún "desconocidas" respuestas para todas estas preguntas, pero la definitiva " verdad " todavía nos elude. (Por algunos otros ejemplos, ver Why Aren't Black Holes Black?, por Robert M. Hazen y Maxime Singer; Archor Books, 1997). Para cada pregunta por contestar, se han propuesto muchas hipótesis y suposiciones, pero pocas serían aceptadas por un " jurado planetario". No se requiere un voto unánime para definir la verdad universal; solamente es necesario un consenso entre epistemólogos competentes.

La errada aplicación de las etiquetas "verdad" y "desconocido" da lugar a prejuicios, antagonismos y guerras. Que se afirme "verdad" cuando la honradez exige que algo se etiquete como "desconocido" divide a la gente. Si fuéramos verdaderamente honestos sobre "lo que no sabemos", sería mucho más sencillo tener un diálogo que identifique el conocimiento comúnmente aceptado. En nuestra búsqueda de la verdad o de un terreno en común, cualquier hipótesis seria es tan buena como cualquier otra como punto de partida. A medida que aprendemos más de la complejidad de nuestro universo, lo más probable, de todos modos, es que la última verdad esté más allá de nuestra imaginación más disoluta.

Después de llegar a un acuerdo sobre "lo que no sabemos" en un área en particular, la discusión puede identificar rápidamente "lo que sabemos", es decir, aquello sobre lo que hay consenso general. En la mayoría de los aspectos de la vida que es en realidad muy pequeña; lo "desconocido" precisamente domina en todos los campos que consideramos de conocimiento humano. Al parecer, para sentirnos menos perturbados sobre lo mucho que no sabemos, hemos creado el extenso ámbito de nuestras todavía no probadas creencias y lo llamados conocimiento. ¿Pero qué es esto llamado así conocimiento?

Para ilustrar la variedad de afirmaciones sobre algunas de las antedichas áreas desconocidas: Hay varias hipótesis sobre el origen del Universo que se excluyen mutuamente (explosión aleatoria hace más de 15 mil millones de años, creación por Dios en una semana, vástago de otro universo, concepción consciente de grandes fuerzas). Varias explicaciones sobre cómo comenzó la vida (relámpagos que alcanzan el mar primordial, panspermia, activación por la voz de un creador, sembrada en el nacimiento del Universo). Por lo menos tres puntos de vista de cómo llegó a existir el homo sapiens (creación directa, mutación al azar, manipulación por seres más avanzados).
¿Por qué  no podemos esclarecer la verdad?

Los afianzados a estas varias teorías hablan, escriben y actúan como si ya poseyeran una verdad exclusiva. ¿Por qué son reacios a admitir que están dando solamente su mejor estimación o inspiración y son contrarios a otras hipótesis? Y.G. Kimura en The Cosmic Light (University of Science and Philosophy Quarterly. Spring, 1999) dice: "La gente es intolerante con otros con diferentes puntos de vista, porque... en el fondo no están seguros de la validez de... sus propias creencias, y... no desean hacerle frente a la posibilidad... de que ellos podrían no saber la verdad después de todo". ¿Este miedo de no tener suficiente certeza hace a la gente más inflexible que lo que el conocimiento de los hechos permite? ¿Algunos simplemente exageran su caso porque eso les hace atraer la atención o el poder sobre los otros? Estas preguntas también ejemplifican "lo que no sabemos". Sabemos que la gente distorsiona la verdad, pero no sabemos por qué.

Cualquiera sea la razón de las injustificadas pretensiones a la verdad, el siguiente salto en el progreso humano requiere más honradez acerca de "lo que no sabemos". Solamente con ella podemos estar abiertos para descubrir la "auténtica verdad". Los científicos de mente amplia y los metafísicos han estado siempre abiertos a tal búsqueda. Pero, cuando reina el dogma, como lo hace en la mayoría de los laboratorios de hoy, en los sermones, en los salones de clase, y en los medios, hay poca esperanza para un profundo avance en lo que concierne al lugar y propósito de los humanos en el Universo.



ALGUNOS DATOS SOBRE EL AUTOR:
Es diplomado en psicología clínica, cosmólogo, escritor e investigador independiente interdisciplinario (en filosofía, ciencias naturales y prehistoria).
Paul es conocido internacionalmente por la hipótesis AB (advanced beings) una intervención avanzada en el desarrollo humano; su teoría de la espiritualidad natural en un universo en evolución de autoaprendizaje; y la investigación sobre la supervivencia de un alma-genoma personal. Sus libros sobre estos temas son Children of a Living Universe, We've Never Been Alone y The Soul Genome, además de multitud de artículos y otros libros como Our Solarian Legacy y Gods, Genes, and Consciousness.


Su investigación en los cinco continentes le ha llevado a mantener sus provocadoras publicaciones, basadas en la ciencia emergente y una experiencia humana creíble.



• Fuente en inglés: newconnexion.net
• Publicado en español con permiso de autor 
  (Reproduced by permission)